Los textos asémico de John M. Bennet se hibridan con algunos signos asémicos que el tío Bill y el doctor Benway han producido para combatir el virus del lenguaje.
En el libro de artista de Carla Arenas «Sht!!!» las grafías asémicas de Bill son también protagonistas.
Pierre D. La construye imágenes con algunos signos asémicos.
El infatigable César Reglero escribe compulsivamente hasta la extenuación. Mezcla su escritura asémica que brota de su incosnciente con las grafías de Bill.
Colaboraciones videográficas de Rafael González sobre las mutaciones, cambios y consolidaciones de la escritura asémica del tío Bill. Gracias a estos documentos podemos observar el desarrollo de esta escritura.
Ahora estás en la InterZona, un lugar que no es un lugar, un espacio que no delimita sus fronteras, un río químico que discurre por entre tu máquina blanda. Nada es lo que parece y todo parece confuso. Las infecciones están a la orden del día, y el lenguaje (el virus más peligroso) acecha a través de cada uno de nuestros pensamientos, de cada palabra dicha, de cada frase enunciada.
Bill, con la inestimable ayuda del doctor Benway, está realizando toda una serie de experimentos e investigaciones sobre la aplicación de la escritura asémica como antídoto contra el virus lingüístico. Este tipo de escritura, que tiene una extensa tradición, cuestiona el predominio del lenguaje e intenta abolirlo para instaurar otros parámetros, para lograr una existencia alejada del verbo. Aquí te ofrecemos algunos de sus apuntes y notas.
#1. «Nuestra máquina blanda es el espacio perfecto para el desarrollo viral de este lenguaje que nos contiene y estructura, que nos determina y condiciona. Como experto manipulador de sistemas simbólicos, pretendo primero implantar el silencio para, en una etapa posterior, desarrollar la posibilidad de una existencia poslingüística, de una vida sin lenguaje».
#2. “Lubrica, primero, todos los actos de la barbarie hasta conseguir una definitiva y total abolición de las definiciones, de todos los significados. Tu siguiente objetivo será invadir los parámetros racionales con un virus letal, desinfectar sus restos e inyectártelos en pequeñas dosis”.
#3. “Toda esta revisión de los significados articula y determina una próxima transformación social: abandona el lenguaje y construye nuevos signos”.
Escucha,
observa, huele, siente
a través de tu máquina blanda cómo
el lenguaje ocupa todo el territorio y cómo, inevitablemente, te
pones enfermo. Todo tiene un sistema nervioso, una sintaxis. Todo
tiene una estructura y una piel. Aniquila entonces esa piel,
arráncatela a tiras para ver el lenguaje deslizándose
por tu interior.
Es
muy probable que el verdadero origen de lo que denominamos hombre
moderno sea
la palabra, y que el verbo se hiciera carne y habitara entre nosotros
como un ser invisible y
cauto.
Solo en la Interzona es posible entrenarse para verlo claramente,
para vislumbrarlo. Solo en este territorio intersticial, donde el
relato se diluye en una infinidad de fuentes, donde se desmiembran
sus referencias
y se desplaza el tiempo, los
anticueros de la
vacuna asémica actúan sobre el lenguje normalizando el metabolismo
humano y regulando el riego sanguíneo. De pronto estas unidades de
palabra e imagen pueden ser activadas biológicamente para pensar en
bloques asociativos en lugar de palabras y alejarse de la
forma lineal de concebir el tiempo.
Ahora,
y gracias al Doctor Benway, ya sabemos que las palabras son un
artefacto obsoleto y caduco, que no se refieren a nada en concreto,
que son signos vacíos, sin contenido, pura forma alienígena
dispuesta a alimentarse de significados para tomar de nuevo el
control de nuestro cuerpo.
Ahora,
y gracias al Doctor Benway, poseemos esta nueva vacuna asémica que,
desde la Interzona, puede convertirnos en unos seres más allá del
lenguaje, en unas entidades poslinguísticas.
Las escrituras del tío Bill tienen una íntima relación interna y una estrecha y todavía emergente relación entre sus signos. Benway intenta en sus investigaciones establecer las relaciones geométricas que estos signos poseen intrínsecamente. En el fondo lo que pretende es conseguir descifrar lo más íntimo de la naturaleza de esta escritura.